Hotel Phoenix
de don Jorge Felton
 

Oportunamente nos ocupamos de don Jorge Felton y de su intervención en las actividades rurales del territorio. Como todos los primitivos pobladores empleó sus energías, que eran muchas, en las faenas del campo, para las cuales reunía las condiciones físicas y morales necesarias para destacarse en ellas. Colaboró con su hermano Herbert en "Kilik-Aike Norte" y trabajó en otros establecimientos de la zona, distinguiéndose siempre por su laboriosidad y su acrisolada honradez.

Un día resolvió dedicarse al comercio y con la misma decisión que puso en todas sus empresas, inmediatamente adquirió el Hotel Bristol de Santa Cruz a cuya explotación se entregó con todo entusiasmo. Esto sucedía en 1912. El negocio marchó bien y cuando su propietario empezaba a recoger el fruto de su trabajo, un voraz incendio que estalló el 9 de julio de 1917 destruyó por completo el establecimiento.

El señor Felton no se desanimó por este contraste y el 16 de agosto fundó el actual hotel Phoenix, uno de los mejores de la costa. El giro del negocio inicióse el 17 de enero de 1918, y desde entonces su dueño ha logrado, a costa de sacrificios pecuniarios de importancia, perfeccionar las instalaciones y dotarlo de todos los elementos de comodidad y "confort" que requieren los establecimientos modernos de su género.

Pero lo que caracteriza al Hotel Phoenix es el ambiente de amable familiaridad que en él encuentran los pasajeros, y que hace grata su estada en él. Más que un comercio, el local que nos ocupa resulta un verdadero "home" para las personas que allí se alojan y ello se debe a la atención constante que el señor Felton y su señora les dedican.

La colonia británica, que en la Patagonia es muy numerosa, se congrega, casi diariamente en el Phoenix que viene a ser así como su club y el lugar obligado para todos sus festejos.

El establecimiento es muy amplio y tiene capacidad para alojar un crecido número de personas. Todas sus dependencias están amuebladas con muy buen gusto y se las ha dotado de todos los elementos necesarios a su objeto.

El Hotel Phoenix tiene un movimiento constante de pasajeros, sobre todo durante los meses de verano, y ello prueba el aprecio de que goza entre los habitantes del Sud y los viajeros que, por razón de sus negocios, están obligados a permanecer temporadas en Santa Cruz.

 
 

 Fuente: «La Patagonia Argentina», p.254