[enfásis editor]
En la bahía de la Victoria [después de pasar la primera angostura del estrecho de Magallanes, Ed.] los individuos de las naos vieron en tierra patagones, y habiendo llegado adonde estaban las carabelas enviaron el esquife de la Anunciada y llevó a las naos un patagon, á quien dieron de comer y beber vino y otras cosas, con que se alegró mucho; pero especialmente con un espejo donde viendo su figura estaba tan espantado que eran dignas de verse las cosas que hacia; le mostraron oro y plata, y no hizo alteracion alguna. Era feo, grande de cuerpo, vestido de una pelleja de cebra, [probablemente un piel de guanaco, Ed.] llevaba en la cabeza un cerco hecho de plumas de avestruces, tenia su arco, y en los pies unas abarcas. Al anochecer señaló que lo llevasen á tierra.
[fin de extracto]